Lo que nuestros hijos no van a hacer: los cambios en el futuro cercano

El futuro llega para engrandecer el presente. Todo está evolucionando con una rapidez vertiginosa que hace temer a los que están acostumbrados a la estabilidad y, por otro lado, hace soñar a aquellos que ven el mundo como un lugar donde dejar volar su imaginación y creatividad. Pero… piensa en tu infancia, imagina cuánto han cambiado las cosas en tan solo 10, 20 o 30 años. Da vértigo, ¿verdad?

El mundo que estamos construyendo, poco a poco, es el mundo en el que van a vivir nuestros hijos. Y te aseguramos que será muy diferente del que ahora mismo conocemos. De la misma forma que ahora las nuevas generaciones parecen haber nacido con una capacidad especial para entender las nuevas tecnologías. Cuando madure dicha generación nativa de las redes sociales e Internet, serán sus descendientes los que les superen en habilidades y conocimientos sobre cómo manejar los nuevos dispositivos del momento.

La generación nativa de Internet, en el futuro, se verá superada en habilidades tecnológicas por sus descendientes

Si hace cientos de años tener un caballo te posicionaba entre los elegidos del estatus más elevado de la ciudad, luego todo evolucionó a los coches personales. Pero ahora, en el presente, este invento tan usado por millones de personas en el mundo también está cambiando. Y es que, si todo lo que conocemos se está desarrollando un poco más, ¿por qué no iba a hacerlo el mundo del automóvil?

LA REVOLUCIÓN DE LOS COCHES AUTÓNOMOS

Piensa en la primera vez que te montaste en un coche: parecía abrumador tener que estar pendiente de tantas cosas a la vez. Poco a poco todos aprendimos a conducir, casi de forma automática aprendimos a compaginar nuestros pies y nuestras manos para circular por la ciudad o por las carreteras.

Pues bien, déjanos decirte algo: tus hijos no lo harán. Cada vez más, el mundo del automóvil está siendo más consciente de lo malo que es para el medio ambiente la emisión de gases contaminantes a nuestra atmósfera. El cambio climático es producto, simple y llanamente, de los excesos de los hombres. Por eso parece obvio que sea también nuestra responsabilidad acabar con ello y comenzar a cuidar más el planeta.

Actualmente la conducción delegada es la fase previa a este coche sin conductor. Se trata de vehículos que permiten soltar el volante sin dejar el puesto de conducción ni la atención de la carretera gracias a un piloto automático que se puede activar en atascos para que adelante y frene automáticamente.

Wake o Move it son algunas de las aplicaciones móviles que lo están poniendo más fácil, para informar del estado del tráfico. Incluso se han comenzado a implantar proyectos para fomentar el uso del coche eléctrico, como el Smart Mobility de Iberdrola, por el cual se instalarán electrolineras cada 100 kilómetros en las principales vías de España.

UN FUTURO QUE NO QUEDA MUY LEJOS

Los expertos en el mundo del automóvil están en lo cierto: los coches autónomos van a dominar el mundo y todo lo que conocemos hasta ahora va a cambiar. Tus hijos no aprenderán a conducir “a la antigua usanza”, aprenderán a manejar un coche autónomo, a establecer sus preferencias y a controlar sus múltiples funcionalidades.

Aunque ahora los coches autónomos que conocemos son caros y difíciles de adquirir por la clase media, esto también va a cambiar. Con la invención de los coches, solo aquellas personas pudientes podían adquirirlos. Luego las empresas se dieron cuenta de cómo fabricar coches con un precio más bajo y, actualmente, hay casi tantos coches como personas en el mundo. Sí, hablamos de millones y millones.

Dentro de unos años todos podremos permitirnos coches inteligentes y autónomos, podremos estar al volante sin estarlo realmente. ¡Incluso leer un libro, consultar el teléfono móvil o ver una película sin peligro de tener un accidente! Y sin renunciar a tu seguridad y la de tus seres más queridos.

Se trata de un ciclo que parece no tener fin. Pero así es el mundo, el ser humano no puede frenar su capacidad de avanzar. ¿Pero no es maravilloso descubrir con escepticismo, sorpresa e inocencia los avances de la tecnología? Como cuando se anunció el primer dispositivo de telefonía móvil, seguiremos viviendo la ilusión de descubrir un mundo nuevo. Así, juntos, seremos testigos de convertir lo imposible en una realidad.