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Cómo ser mejor líder haciendo mejores preguntas
El concepto de liderazgo ha ido evolucionando con el tiempo. Hasta ahora, hemos sido testigos de formatos inflexibles y autoritarios, pero esto ha ido tornando hacia un hacer más participativo, más colaborativo y menos jerárquico. Los equipos de trabajo horizontal son la tendencia que dominan actualmente los métodos de gestión de recursos humanos. Entonces… ¿Cómo ser el mejor líder?
Conceptos como el work team o team building nos recuerdan que, actualmente, el líder es una figura más comprensiva y cercana. No se trata de aleccionar a nadie, sino de empujar a los trabajadores a sacar lo mejor de ellos mismos y empoderarlos. Las nuevas tendencias de liderazgo se encaminan, sin duda, a reforzar y fortalecer los lazos que unen al equipo. Un buen líder ejercerá una influencia en un grupo de personas para conseguir una meta. Pero, ¿cómo llevar a cabo una buena dirección corporativa?
John Maxwell, experto en liderazgo, afirma que ser líder y liderar son dos actividades diferentes
John Maxwell, escritor reconocido por sus planteamientos sobre el liderazgo, afirma que “todo surge o se desploma por liderazgo”. Así argumenta: “Saber dirigir es solo la mitad de la batalla. Entender lo que es ser líder y liderar son dos actividades diferentes”. Maxwell es autor de títulos como ‘Las 21 cualidades indispensables de un líder’, ‘El manual del liderazgo’, ‘Principios’ o ‘El poder de las relaciones’, entre otros.
LA TÉCNICA PARA SER UN BUEN LÍDER
Maxwell plantea tres preguntas esenciales que, en su opinión, debería hacerse a sí mismo cualquier representante o superior de un equipo:
- ¿Quién eres? Según Maxwell un buen liderazgo comienza con líderes que saben quién son. “Esfuérzate por conocerte personalmente, conoce tus fortalezas y tus debilidades, entiende tu temperamento, averigua qué experiencia personal te puede ayudar, conoce tus hábitos de trabajo, tus ritmos diarios, con qué tipo de personas trabajas mejor y con cuales tienes más dificultades. Conocerse personalmente es una tarea larga, complicada y no siempre divertida, pero es básico para liderar con eficacia.
- ¿Cuáles son tus valores? Tus valores son el alma de tu liderazgo y dirigen tu conducta. John Maxwell defiende que “antes de crecer y madurar como líder, debes comprender claramente tus valores y comprometerte a vivir coherentemente con ellos, pues conformarán tu conducta y la forma en que lideras”. Hacer lo correcto por los motivos correctos, crear un ambiente de confianza con otras personas, descubre cuáles son tus valores innegociables y cómo estos pueden ayudar al crecimiento del equipo.
- ¿Qué estrategias de liderazgo deseas poner en práctica? Si deseas llegar a ser mejor líder, no solo debes conocerte y definir tus valores, también debes vivirlos. ¿Qué clase de hábitos y sistemas practicarás constantemente? ¿cómo te quieres organizar? ¿qué harás todos los días al llegar al trabajo? ¿cómo tratarás a la gente? ¿cuál será tu ética? ¿qué clase de ejemplo establecerás? El plan de ejecución es tan importante como las dos preguntas anteriores. La conducta creará un hábito y el hábito unas costumbres que construirán la filosofía corporativa.
Y es que con frecuencia se piensa de forma errónea que el secreto de un buen líder está en conocer todas las respuestas pero, tal vez, y en esta ocasión, sea interesante reflexionar sobre si el quid de la cuestión no será formular las preguntas correctas. Pero esto no es tarea sencilla, nos hace dejar a un lado la posibilidad de resolver con soluciones simplistas y animar a nuestros trabajadores a hacer lo mismo. Requiere tacto y coraje, empatía y un alto grado de apertura a nuevas ideas. Precisa estar dispuesto a escuchar y a dar seguimiento.
Sinceridad y colaboración son la fuerza motora del equipo. El buen funcionamiento de un grupo precisa de mucha confianza. La confianza ayuda a superar con éxito cualquier situación y plantear cada acontecimiento desde un punto más interesante de fructificar. ¿Quieres ser un buen líder? Deja a un lado los tópicos y haz una reflexión interna. Cuestiónatelo todo. Inspira creatividad, curiosidad y un razonamiento profundo en los trabajadores. Comienza por ti y por hacerte las preguntas correctas.
