¿Qué papel tendrán los robots en nuestras vidas?

Los robots, el nuevo mundo avanza sin tregua y lo cierto es que aún no tenemos clara la relación que queremos adoptar con esta ciencia encargada de estudiar, diseñar y fabricar máquinas capaces de realizar labores humanas

Estas máquinas han sido diseñadas por el hombre para sustituir de manera parcial o total algunas de las tareas que realizan los seres humanos en la actualidad. 

El auge de la robótica

Desde la aspiradora autónoma que limpia nuestro hogar y se recarga sola, hasta los vehículos sin conductor, pasando por la impresión 3D que permite crear una casa en menos de 24 horas.El protagonismo de la tecnología es incuestionable y coexistir con robots humanoides es más que el futuro, el presente. ¡La automatización es imparable!

Confiar y ser responsables en este momento es una tarea necesaria. Y es que hay que evitar el miedo, ya que la tecnología puede ser una gran aliada si sabemos cómo usarla y lo hacemos de forma sensata y consciente. 

Lo bueno del auge de la robótica, es que podemos aprender desde el inicio y estudiar este sistema dentro de la competencia digital, dentro de la educación y con una clara responsabilidad social tanto personal como colectiva. Los robots formarán parte de nuestra cotidianidad y se integrarán en la sociedad, pero siempre en la medida que nosotros queramos. 

¿Cómo serán los robots del futuro inmediato?

Expertos de todo el mundo analizan y estudian cómo cambiarán nuestra vida diaria los robots. Así, auguran que en el año 2020 se dará un punto de inflexión tecnológica en la que los robots “serán capaces de ver, actuar, hablar, dominar el lenguaje natural y ser más inteligentes”. ¿Quién no se acuerda de la famosa película protagonizada por Robin Williams “El hombre bicentenario”? 

Pronto, los robots androides nos ayudarán en las tareas más comunes y contarán con funciones y niveles de inteligencia tales que se convertirán en compañeros del día a día para la especie humana. 

Más aún, los especialistas aseguran que la inteligencia de nuestras máquinas será equiparable a la nuestra. Por tanto, habrá diferencias tangibles entre las sociedades que cuenten con estas máquinas y aquellas que no las posean. 

Y es que en estos últimos años, los avances han sido evidentes: sentido del tacto robótico, reconocimiento de voz, nanotecnología, antropología robótica, etc. Todo esto será una ventaja si hacemos buen uso de ello y educamos a nuestros hijos en el correcto uso de estas máquinas que cada día se asemejan más a nosotros, pero que en muchas cualidades y virtudes jamás podrán alcanzarnos. 

Una herramienta para hacernos la vida más fácil

Nos ayudarán con las tareas del hogar, con la educación de nuestros hijos, en las labores más arduas del campo, en las fábricas. Los robots del futuro más cercano estarán cualificados tanto para solucionar problemas en una cadena de montaje, como para someterse a los más peligrosos ambientes, eliminando el fantasma de los riesgos laborales.  

Pero lo cierto es que, a pesar de las ventajas que puede suponer la introducción de los robots en nuestra cotidianidad, es un concepto que nos intriga y nos mantiene alerta, sobre todo teniendo en cuenta que hace unas décadas esto resultaba una visión imposible para la mayoría de las personas: la posibilidad de que una máquina adoptara aspecto casi humano y fuera capaz de operar como una persona normal, era más bien un cuento de ciencia ficción.