Regalar tecnología en Navidad, pero con cabeza

Desde hace unos años, el otoño se ha convertido en época de comprar tecnología. Son muchas las personas que aprovechan los descuentos de los comercios y las grandes plataformas online para adquirir aquellos productos que desean. El 11 del 11, el Black Friday o el Cyber Monday se han convertido en las fechas por excelencia para realizar este tipo de compras. ¿Eres de los que aprovechan para regalar tecnología en Navidad? Entonces este post te interesa.

Antes de regalar tecnología en Navidad piensa… ¿será una buena decisión?

De un tiempo a esta parte Papá Noel y los Reyes Magos llegan cargados de aparatos tecnológicos para niños y mayores. Sin embargo, muchos de ellos acaban abandonados en un cajón o se convierten en un problema para los que lo reciben.

Empecemos por los más pequeños. ¿Debemos regalarle esa consola de última generación cuando apenas juega con la que ya tiene? ¿Comprarle el smartphone que pide es una buena idea? Leemos en las noticias de manera recurrente sobre uno de los grandes males de la sociedad actual, el de los niños pegados a las pantallas. Los hijos de los Millenials, la llamada Generación Alfa, parece que han nacido con un don para entender todos los aparatos. Todavía no saben hablar, pero ya se manejan para desbloquear el teléfono móvil o el iPad, rechazar llamadas para seguir viendo sus vídeos favoritos o son capaces de juntar las sílabas correctas para activar el asistente de voz. Y cuando son un poco mayores, prefieren encerrarse en su cuarto a salir a jugar con sus amigos, algo que se ha convertido en un verdadero quebradero de cabeza para los padres.

Los colegios han cambiado los libros de texto por aplicaciones. El ocio para ellos ha cambiado pero, ¿cuáles son las consecuencias? Problemas para relacionarse, sobrepeso debido al aumento del sedentarismo o trastornos psicológicos son algunas de ellas (las más negativas). Así que, antes de comprar lo último en tecnología para los niños, tal vez haya que reflexionar y pensar si será lo correcto. Hablar con sus padres, sus profesores o con aquellas personas que están con ellos es la mejor idea para acertar a la hora de elegir este tipo de regalos.

En cuanto a los adultos, ¿es necesario un teléfono nuevo? ¿Dará utilidad al nuevo gadget tecnológico o se cansará de él a la primera de cambio? Sirva como ejemplo el caso de las gafas de Google que prometían convertirse en un elemento fundamental para poder salir a la calle y, en el mejor de los casos, su utilidad ha sido desarrollada con objetivos muy específicos, muy alejados del día a día de una persona tipo.

Regalar con responsabilidad


Ahora que ya te hemos contado nuestras reflexiones, ¿cuál es la tuya? ¿Piensas de verdad que esa máquina será un instrumento que favorezca las relaciones, el aprendizaje o la comodidad de quien la recibe? Estamos de acuerdo que un regalo en muchas ocasiones no es sinónimo de necesidad, pero hacer regalos con responsabilidad es una buena opción para evitar los puntos negativos que ya comentamos.

Con esto no queremos decir que no deban hacerse regalos tecnológicos en las próximas fechas, si no que, antes de comprarlos, merece la pena asegurarse que se trata de un aparato al que se le dará uso, ya sea por diversión, para aprender o para hacer la vida más fácil. Un último apunte en este sentido. A la hora de elegir el regalo, piensa en la persona que va a recibirlo. Aunque la tecnología no tiene sexo (es cosa de todos), sí es necesario tener una edad, una formación y cabeza suficiente para aprovecharla al máximo. ¿Vas a regalar tecnología en Navidad sin pensar en las consecuencias?