Comercio electrónico: retos y ventajas

La digitalización está siendo protagonista estos últimos meses, tanto en el ámbito laboral, mediante la extensión del teletrabajo y la comunicación virtual; como en todos los aspectos de la vida. 

Los usuarios, durante el confinamiento, se han acostumbrado a gestionar sus servicios online y, muy probablemente, sigan haciéndolo en la ‘nueva normalidad’. 

La situación actual ha sacado lo mejor de la tecnología y las personas son ya conscientes de todos los beneficios y ventajas que ofrece el entorno digital.

Alcance global

La mayor y más importante ventaja del comercio electrónico es que permite que una empresa o individuo llegue al mercado global. Satisface las demandas del mercado nacional e internacional, debido a que sus actividades comerciales ya no están restringidas por límites geográficos.

Abierto las 24 horas

Los negocios o establecimientos comerciales fuera de la red usualmente tienen un horario determinado. Sin embargo,  el comercio online se encuentra disponible en cualquier momento.

De esta forma un negocio permanece abierto las 24 horas del día, los 7 días de la semana y esto, a su vez, aumenta significativamente las ventas y los beneficios.

Mejores ofertas para clientes

Con la ayuda del comercio electrónico, los consumidores pueden investigar fácilmente un producto específico y, a veces, incluso encontrar el fabricante original para comprar a un precio mucho más barato que el que cobra el mayorista.

Facilidades en el proceso de compra

El comercio en línea también ofrece a los compradores una gama más amplia de productos y servicios para elegir, a diferencia de las compras convencionales, sin la molestia de cargar grandes bolsas de la compra y atascarse en embotellamientos desordenados, lo que resulta más conveniente y ahorra tiempo.

Además de esto, las personas también encuentran reseñas publicadas por otros clientes sobre los productos comprados en un sitio de comercio electrónico en particular, que pueden ayudar a tomar decisiones de compra.

Costos más bajos para el negocio

Para las empresas, el comercio electrónico reduce significativamente los costos asociados con la comercialización, la atención al cliente, el procesamiento, el almacenamiento de información y la administración de inventarios.

A pesar de las ventajas, todavía persisten muchos de los retos que se identificaron cuando el e-commerce dio sus primeros pasos en el país. El reto del comercio electrónico ahora pasa por ofrecer experiencias virtuales o híbridas y crear una comunidad en torno a la marca.

Industria logística

El primer reto a superar es el de la industria logística y su incapacidad de adaptarse a las nuevas demandas del consumidor. 

Mejorar la confianza

Factores como el tiempo de entrega, la falta de diversos métodos de pago o la ausencia de la prueba de producto en algunas categorías pueden mermar las expectativas de los usuarios. Por tanto, las empresas de comercio electrónico deben hacer sentir a sus consumidores cercanos y seguros facilitando la comunicación con el usuario, añadiendo botones sociales accesibles, teléfonos de atención al cliente o una buena página de preguntas frecuentes. 

Mejorar la experiencia de compra

Los consumidores aprecian positivamente una buena experiencia de compra y el valor añadido que puedan ofrecer las tiendas online. Algunos de los factores imprescindibles que influyen en la experiencia de compra y, por tanto, hay que prestar especial atención son: la usabilidad de la web, el diseño atractivo, los contenidos útiles y de calidad, la agilidad en los procesos de compra y la atención al cliente antes, durante y después de la compra. 

La personalización

Es uno de los retos más difíciles pero quizás de los más importantes. La retención de los clientes es cada vez más difícil y, por tanto, la personalización aporta un gran valor añadido y de marca. Además, se construye una experiencia que el consumidor agradece e incentiva la repetición de compra.