Clubhouse: la otra red social a que querrás entrar (pero no podrás) en 2021

Una de las características que nos definen como seres humanos es que cuanto más exclusivo y “prohibido” es algo, más llama nuestra atención. Este punto es, posiblemente, la característica más atractiva de la red social de la que todo el mundo habla: Clubhouse. Bueno, la otra red social de la que todo el mundo habla, porque desde hace unos meses Twitch también está en boca de todos, sobre todo de los más jóvenes.

Clubhouse es una plataforma que inició su andadura en mayo de 2020 y que en apenas un año ha logrado un crecimiento de popularidad increíble. ¿El secreto? El halo de exclusividad que lo rodea, ya que al ser una red social tan reciente está aún en fase de pruebas, por lo que solo está disponible en iOS. Además, se necesita una invitación para acceder, por lo que ser miembro de Clubhouse no es tan sencillo como serlo, por ejemplo, de Twitter, Facebook o Twitch donde solo necesitamos un correo electrónico.

Mientras que en las redes sociales “antiguas” donde primaba la imagen, el texto y lo visual, en Clubhouse importa el audio. Aquí el usuario se une a Canales, bautizados como «habitaciones», en las que se habla como si estuviera en una conversación telefónica. Si lo prefiere, escucha solo lo que dicen los demás como si de un programa de radio o podcast se tratara. Esta red fue creada en sus inicios por Paul Davison y Rohan Seth como una aplicación para crear podcast de manera sencilla. Se iba a llamar ‘Talkshow’, pero la idea no terminó de cuajar.

El audio, el secreto de Clubhouse

La comodidad es, por tanto, otro de los grandes atractivos de esta red social. Lo único que tiene que hacer el usuario es escuchar y, si le apetece, intervenir. No tiene que pensar un texto como ocurre en Facebook o en Instagram, y no tiene que pensar qué video subir como ocurre en TikTok.

Esto pone en evidencia un formato que parecía que teníamos olvidado: el audio. Muestra de ello es el éxito que han tenido las notas de voz en WhatsApp o en Instagram o incluso el éxito de Twitch que es una aplicación que consiste en hablar y escuchar. Es curioso que este formato recupere importancia y triunfe en las redes sociales adaptadas a él en un momento en que nuestros contactos sociales están más reducidos que nunca y hemos tenido que reducir las conversaciones cara a cara en un espacio físico. 

¿Quién pertenece a esta comunidad?

El funcionamiento de Clubhouse es sencillo. Como decíamos, el usuario entra en una habitación cuyo tema de discusión sea interesante para él; si solo quiere escuchar no tiene que hacer nada más. Si quiere intervenir deberá “levantar la mano” y esperar a que el moderador le dé paso. Las conversaciones que tienen lugar aquí, ni se graban ni se transcriben. Solo se almacenarán durante el periodo en el que ese debate o esa habitación estén disponibles. En cuanto estos se cierren, estos audios se borrarán, al igual que ocurre con las stories efímeras de Instagram o Snapchat.

Ya lo hemos comentado antes: entrar en Clubhouse es difícil pero no imposible. Tanto es así que personalidades de la comunicación, marketing, emprendimiento y la tecnología ya pertenecen a este club e incluso le están sacando provecho. Esto se debe a que, al elegir tú las conversaciones, puede ser la alternativa perfecta para hacer networking o asistir a eventos en una época en la que estos están reducidos al máximo.

Twitter contraataca

Como suele ocurrir cuando una red social tiene éxito, Twitter ya tiene su plan de contraataque para captar parte del interés que está suscitando clubhouse. Se llama Spaces, salas en español) y su lanzamiento se produjo en diciembre por lo que imaginamos que muy pronto estará disponible en todos los perfiles. 

Spaces permite que cada usuario cree su espacio para luego moderarlo e ir dando voz a los participantes.